El
Zóhar, capítulo Vaikrá, punto 135: "Los siete
firmamentos se hallan arriba, y en cada uno de ellos hay estrellas, signos y
soles que sirven en todos y cada uno de los firmamentos.
En todos los
firmamentos, hay Merkavot (plural de Merkava,
carroza), una encima de la otra, para asumir la carga del reino de su Amo.
Y en todos los
firmamentos hay Merkavot y soles que son diferentes uno del
otro, ubicándose uno encima del otro. Algunos tienen seis alas y algunos tienen
cuatro alas; algunos tienen cuatro rostros y algunos tienen dos rostros y
algunos tienen un rostro; algunos son fuego ardiente, algunos son agua, y
algunos son viento, tal como está escrito, “Él toma por mensajeros a los
vientos, y a las llamas del fuego por Sus ministros”.
Los
“ángeles” se denominan las fuerzas de los niveles inanimado, vegetal y animal
relativas al hombre. En este mundo, el hombre existe dentro de la Naturaleza
—inanimada, vegetativa y animal— la cual, le proporciona el ambiente necesario.
Lo
mismo ocurre en el mundo espiritual entre las fuerzas de nuestra alma.
Además del nivel humano, existen diferentes fuerzas en el nivel espiritual:
inanimado, vegetativo y animal, y estas fuerzas se llaman “ángeles”.
Con
ayuda de estas fuerzas establezco mi actitud hacia el Creador, deseando
dirigirme a Él, encontrar la conexión con Él. Mi alma existe por hecho de
estas fuerzas, esto es su entorno. De este modo avanzo.
Los
ángeles son las fuerzas del alma del hombre. Él las organiza igual que en este
mundo, para que puedan existir en su alma. Él dirige todas estas fuerzas hacia
el Creador y entra en contacto con Él.
Estas
fuerzas no tienen ni libre albedrío, ni su propia realidad. Ellas son como
las fuerzas de nuestra naturaleza: la fuerza de gravedad, la acción recíproca
entre moléculas y átomos, entre objetos grandes y pequeños. Todos ellos son
ángeles.
No
imaginen, ¡ángeles con alas volando en el aire! Las alas, de las que habla
el Zóhar, son las cubiertas, las pantallas que estos
ángeles traen al hombre. Con ayuda de estas fuerzas, el hombre alcanza su
propia realización. Entonces, tiene la fuerza de la pantalla. Esto es lo que
significa un “ángel con alas”.
Nuestra
actitud hacia ellos debe ser igual que a la naturaleza de este mundo.
Excepto las personas, las demás fuerzas que hay en el mundo son ángeles. En
realidad, siempre quiero organizarlas para sentirme cómodo. Lo mismo pasa en la
espiritualidad.
(Definción diaria, kabbalah.info/es)
0 comentarios:
Publicar un comentario