El secreto de la eterna juventud

La Cabalá trata acerca del alma,

es el único órgano que no envejece.

cuanto más inviertes en él,

¡más joven te vuelves!

Hasta tal punto,

que a veces te sientes incómodo por los demás,

te pareces y te desenvuelves

como un energético chiquillo,

cuando todos a tu alrededor están tan serios,

presuntuosos, formales,

y tú, siempre un niño.

(“El punto en el corazón”, Michael Laitman)

PREGUNTA: Por qué las personas sueñan con ser jóvenes por siempre?

RESPUESTA: Es natural que una persona se afane por preservar su juventud. Pero lo que es más importante para ella es esconder los pensamientos sobre su muerte inminente. El miedo a la muerte es muy evidente incluso en los animales. El cuerpo animal no quiere morir—es un instinto natural.

Aunque los animales no se preocupan por la cuestión de la existencia eterna, están aterrados de la muerte. Este miedo también vive en los humanos porque son animales.

PREGUNTA: Estoy más preocupado, no en pensamientos sobre la muerte, sino sobre el envejecimiento. Estoy frente al espejo, veo nuevas arrugas y me doy cuenta que la vejez ha llegado. ¿Por qué es tan importante para los humanos ser jóvenes?

RESPUESTA: No es la edad avanzada lo que angustia a una persona, pero si, el hecho de que esto significa el acercamiento de la muerte. Por sí misma, la vejez es un concepto relativo. Cuando tenía diez, veía a personas de cincuenta años como muy viejas, cuyas vidas habían terminado. Hoy tengo setenta, y me gusta mi vida. No la cambiaría por una de menor edad.

Estoy envejeciendo, pero la pregunta es si he realizado mi propósito en la vida, si aún no he ejecutado el programa y si he construído planes para el futuro.

PREGUNTA: ¿Cuál es el secreto de la eterna juventud?

RESPUESTA: El secreto de la eterna juventud es corregir la propia naturaleza, la del egoísmo, que nos obliga a preocuparnos sólo de nosotros mismos e ir hacia el altruismo con el fin de preocuparnos sólo de los demás.

Este es un enfoque hacia la vida y hacia las personas, totalmente diferente. Cualquiera que deje de preocuparse por mantener vida y juventud eternas para sí mismo y, empiece a cuidar de los demás,  vivirá para siempre. De hecho, llega a ser similar a la infinita, perfecta y eterna Luz de vida que llena todo el universo.

La persona cambia su naturaleza por la naturaleza de la Luz y se convierte en un canal, por medio del cual la Luz fluye hacia las persona. La persona recibe Luz sólo con el fin de transmitirla a los demás.

PREGUNTA: Y mientras tanto ¿no envejecerá?

RESPUESTA: Toda nuestra vida tiene lugar dentro del cuerpo biológico animal y, es por esto que es tan corta. La existencia eterna sólo es posible si desarrollamos la fuerza de amor y otorgamiento llamada alma.

La persona que ha recibido este poder siente que pertenece a la eternidad, a otra realidad, al mundo superior, al ¨Jardín del Edén¨. Por lo tanto, la muerte de este cuerpo físico, de esta materia proteica no le molesta.

El individuo tendrá que envejecer y morir -esto es inevitable y siempre será así. Pero durante su vida en este cuerpo, la persona tiene la oportunidad de revelar su alma, expandirla y elevarla a grado tal, que por medio de su fuerza interna de otorgamiento y amor llegará a ser similar a la Luz, la fuerza general de toda la realidad, que es llamada el Creador.

PREGUNTA: ¿Esto tiene algo que ver con la religión?

Respuesta: Esto no está conectado de ninguna forma con la religión y está disponible para cualquier persona de cualquier parte del mundo. La vida humana no está limitada al cuerpo físico, el cual está destinado a envejecer y morir, tarde o temprano. Esta vida material nos es dada como una afortunada oportunidad para encontrar y desarrollar la propia alma durante la existencia de este cuerpo.

La persona promedio siente todo a través de su cuerpo y, por lo tanto, no es importante si es joven o vieja ni cuántas arrugas tiene. Aquí estamos hablando de desarrollarnos más allá de nuestro cuerpo biológico, la materia proteica, el cuerpo animal, hacia otro cuerpo -uno espiritual, es decir, el deseo de otorgar y amar, de cuidar a los demás.

Este deseo es llamado cuerpo espiritual o alma. Durante esta vida en un cuerpo físico tenemos la oportunidad de desarrollar el cuerpo espiritual -el deseo de otorgar. Por lo tanto, gradualmente nos movemos con todos nuestros pensamientos, intenciones y sensaciones en el cuerpo espiritual y empezamos a identificarnos con el alma.

A pesar del hecho de que nuestro cuerpo físico vive en este mundo de la misma forma que todos los demás, nuestro cuerpo espiritual llega a ser más importante para nosotros. Estamos preocupados del alma y la desarrollamos y, le concedemos cada vez menos importancia al cuerpo físico hasta que desaparece de nuestro campo de atención.

No sentimos su muerte física, como las personas de este mundo. Y llega un tiempo en que nos separamos totalmente de ese cuerpo porque ya no tenemos nada que hacer con él. De hecho, hemos desarrollado nuestra alma y, por medio de esta, sentimos la existencia dentro de la fuerza de otorgamiento y amor, la Luz Superior que llena a todo el universo.

(Por Rav Michael Laitman, De Kab.tv ¨Una vida nueva”)

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EL PUNTO EN EL CORAZÓN
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